Un amigo colombiano había visitado Tolú unos meses atrás y
le pareció un destino interesante. Lo recomendó ampliamente en un grupo que
compartimos. Aprovechando el lanzamiento del vuelo Lima – Cartagena, de Viva Colombia,
había previsto pasar 4 días con mi familia en Cartagena, pero, como ya habíamos
ido antes, sobre la marcha decidí cambiar el itinerario del viaje previsto.
Renté un auto en Cartagena y decidí manejar hasta Tolú, para finalmente pasar
solo una noche y una mañana de domingo en Cartagena.
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| Playa de Tolú |
Por cambio de itinerario en Viva Colombia (nos canceló el vuelo
directo Lima – Cartagena) y retraso en el enlace en Bogotá, llegamos en hora punta
a Cartagena (6pm). Atravesar la ciudad nos tomó como 2 horas (a pesar de ser
relativamente pequeña), luego algo más de 3 horas llegar hasta nuestro destino
(en una carretera con varias interrupciones por obras).
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| Hotel Kevins de Tolú |
Pasadas las 11pm llegamos al Hotel Kevins en Tolú, un hotel
de mediano tamaño, amplia piscina, habitaciones simples pero cómodas y un muy
agradable desayuno. Todo ello a un precio bastante correcto. Por la hora del
arribo, sólo llegamos a dormir.
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| Playa de Tolú |
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| Playa de Tolú |
Al día siguiente, tras el reconfortante desayuno, fuimos a
la playa, ubicada a dos cuadras del hotel. Todos nos sorprendimos por su
belleza y la tranquilidad de sus aguas. A la altura de nuestro hotel, en la
zona céntrica de Tolú, con espigones, habían separado pequeñas “playitas” de
unos 100 metros de longitud cada una, unas 6 playas independientes entre sí.
Elegimos una y fue sólo para nosotros 4. Era un jueves, temporada baja y éramos
casi los únicos turistas en Tolú.
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| Parque Principal de Tolú |
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| Parque Principal de Tolú |
El pueblo es pequeño, más una caleta de pescadores adaptada
como playa turística que un destino tipo Cancún. No podría decir es un pueblo
especialmente atractivo, pero tiene todos los servicios básicos para una
estadía confortable: restaurantes, supermercados, farmacias, y lo mejor:
personas muy amables. Además, uno se siente arropado por la simpleza del entorno.
La principal deficiencia es que, salvo en los supermercados y el hotel, en ningún
restaurante aceptan tarjetas de crédito, lo que limitó nuestra capacidad de
pago. Felizmente había llevado efectivo que fui gastando con prudencia.
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| Playa de Coveñas |
Estando en Tolú se nos ocurrió visitar Coveñas, que está a
uno pocos kms de allí. Es un destino muy distinto a Tolú. Es un balneario
moderno, de amplias playas, con grandes edificios en un malecón. Un mar color turquesa,
que es prácticamente una piscina, un destino perfecto. Al igual que en Tolú no
logramos que nos acepten las tarjetas de crédito.
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| Playa de Coveñas |
Ambos destinos son muy agradables. Tuvimos la inmensa suerte
de llegar en temporada baja, lo que nos permitió disfrutar de playas “privadas”,
sin nadie que nos perturbe. A diferencia de Cartagena o Santa Marta, prácticamente
no hay vendedores que incomoden con su insistencia; tampoco vimos drogadictos
(como en ciertas playas peruanas) o personas que perturben unas vacaciones
familiares.
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| Iglesia Santiago de Tolú |
Entre Tolú y Coveñas esta la ciénaga “La Caimanera” que se veía
muy interesante para visitar, mediante un breve paseo en bote, lamentablemente
no tener efectivo disponible nos limitó la posibilidad de hacerlo. Si volvemos,
seguro por allí iremos.
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